martes, 19 de febrero de 2008

Comer


Pocos placeres hay más placenteros que pecar de gula.
No hay duda que si eso que cuentan fuera verdad, frente al Gran Juicio me condenarían, entre los pecados capitales, quizás no por uno sólo, pero sin duda más que por cualquier otro por el segundo.
Bueno, este pecador otro día hablará, a lo mejor, de otras posibles condenas... de momento la gula.

Cito aquí la web donde me entretendré dentro de un rato (si no me duermo, cosa probable, uno se va haciendo mayor, ya no me bastan esas 5 o 6 horitas de sueño que me dejaban cómo una rosa) la web:
Forum Gastronómico

Que este año se celebra en Galicia.

He llegado a este sitio a través de unos pasos que resumiré:

Primero cocinar

Fregola sarda con gambas y rape, al picante de Guilin

Ingredientes:

Fegola (bolitas irregulares de sémola de trigo duro) Fregola Sarda
Ajo, Aceite Extra virgen de oliva, 2 0 3 anchoitas, perejil
Pomodori pelati
Rape, la cabeza para el caldo y una colita para la salsa,
unas gambas

Por una lado se prepara el sofrito: guindilla de Guilin (traida del último viaje a China) ajo, perejil, anchoas, aceite y las cabezas de las gambas (las colas limpiaditas a parte), se añaden los tomates y sal y sólo en el último momento el rape y las gambas (4 minutos y se apaga).
Se hierve la Frégola en el caldo preparado anteriormente con la cabeza del rape (el caldo se filtra y se separa)
Se mete la frégola en una olla: el líquido hirviendo tiene que ser 1 litro por cada 100 gramos de frégola (añadid agua al caldo si hiciera falta). Tiempo de cocción depende de la frégola, unos 15 minutos o más.
Se quita un vaso de agua de cocción, se escurre la frégola y se echa en una fuente honda y bonita la salsa, la frégola y unas cuchardas de agua de cocción, mezclar, se tapa y esperad unos 10 minutos más antes de ponerse morados.

Después cenar (se refresque la lengua excitada por el picante con una copa de Falanghina del Sannio muy muy fresquito)
y cansadito de cuentos, cosquilitas y masajitos... me meto, en lugar de irme directamente al ordenata, delante de la tele y enchufo Canalcocina
La tele cansa, vuelvo al ordenata, rápida mirada al correo.

De allí paso a Gambero Rosso

De aquí salto a El País donde, en la sección Cultura leo:
que Ferrá Adrià se rinde la mareo galisco... quiero decir, al marisco gallego

y también allí leo:
Adriá se defiende de las críticas y asegura que de El Bulli "sólo se ve la última parte". "Estuvimos 14 años sin ganar dinero, y esto no lo explica nadie", protesta el cocinero y empresario. Ahora, respaldado por el reconocimiento internacional...

el Adrià se defiende... es una vergüenza que un genio tenga que defenderse, cómo hemos caído señores... Pero es verdad, no tendría que extrañarme: yo mismo lo defiendo casi una vez a la semana de sus invidiosos detractores, estamos rodeados querido Ferrán, ya han empezado a levantar cabeza los incultos anoréxicos o los comedores compulsivos de libritos de lomo... nos rodean!!

Comer, ops: cenar en el Bulli es una experiencia que poco tiene que ver con el alimentarse.
Mucho más tiene que ver con una orgía, donde la línea de los sueños y de las fantasías desenfrenadas... se une con las dentaduras y otras partes sensibles del cuerpo.
Comer, ops, cenar en el Bulli se parece mucho más a una visita a un bonito Museos de arte contemporánea que a una sala de un restaurante cualquiera...
Cualquiera... esso es.

Me gustaría comer, ops, cenar en El Bulli. No he ido nunca y supongo que no iré hasta que le quiten por lo menos 4 estrellas michelines
Estrellas no, pero michelines sí que le sobran al autor de este humilde blog...

Bueno, nunca se sabe... de momento voy a comerme una lonchita de tiramisú que hizo con tanto amor y cariño mi querida Señora y a la cama, que mañana toca trabajar

cierro y paso... con un Mon Cherí

lecturas:
Blog Gatronomía


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